Germán Maritegui es conocido como el jurado más exigente y con menos pulgas de MasterChef. Esta vez, el cocinero sorprendió al ponerle los puntos a Aquiles.
"¿Cómo venís?", le preguntó al acercarse a su estación de trabajo. "Estoy terminando de limpiar los huesitos (del cordero). Tampoco le falta tanto", respondió el participante.
Interrumpiéndolo, Maritegui lo corrigió: "Le falta un montón. No le tiene que quedar absolutamente nada (de carne)". Retomando la palabra, Aquiles siguió con su explicación: "Voy a hacer el cordero en la sartén, como hago yo la carne. Voy a ir por eso".
Un poco molesto, el jurado lo cruzó: "No me hagas el gestito este porque hoy es el día de eliminación y te podés ir a tu casa". Sorprendido, Aquiles expresó: "Hoy Germán vino medio raro. Bueno, no voy a entrar en la dinámica de gestos, de cómo hablo. Perdón. Yo soy de mover mucho las manos mientras hablo".
Sin dar el brazo a torcer, Martitegui retrucó: "No, es una dinámica de actitud no de gestos. Los gestos están para expresar lo que a uno le pasa. Entonces, vamos de vuelta".
"Bueno, vamos. Estoy blanqueando unos papines para después pelarlos y hacerlos a la crema con puerro y panceta. Serían unas papas a la crema pero más elevadas", dijo el participante bajando unos cambios.
Finalmente, dándole una sugerencia, el chef le dijo: "Si querés elegancia, los hervís, los pelás y los confitás en oliva con unas hierbas. No le pongas crema". "Es algo mucho más simple de lo que yo pensaba pero llevado a la perfección", respondió Aquiles intentando seguir sus instrucciones.
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