Cuando se separó de Benjamín Vicuña, la China Suárez se esforzó mucho para que todos creyeran que había sido en buenos términos. Sin embargo, a medida que se iban conociendo detalles de la ruptura, se empezó a notar que las cosas entre ellos no habían quedado nada bien.
Hubo además algunas declaraciones públicas de la actriz que molestaron especialmente a Vicuña y en consecuencia, los reproches del chileno no tardaron en llegar. Pero en las últimas horas, la China tuvo un gesto de buena voluntad para acercar posiciones con el padre de Magnolia y Amancio.
Un usuario le preguntó si 'seguía queriendo a la gente chilena' y ella no dudó: "Obvio, dos de mis hijos son mitad chilenos. Siempre que fui, me trataron muy bien. Viví momentos muy felices".
La frase final, sea o no casual, deja en claro que guarda buenos recuerdos del tiempo que compartió con Vicuña, independientemente del trato que hoy puedan llegar a tener. Y que además, haga esa confesión pública sería la mejor manera de levantar bandera blanca.