A CORAZÓN ABIERTO

Fuerte relato de Maxi Diorio: "Cuando nací los médicos pronosticaron lo peor y dijeron que no iba a poder caminar"

El reconocido bailarín de tantos Bailando por un sueño y actual integrante del espectáculo América show, repasó su dura historia de vida con Pronto en una charla a fondo.

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Maxi Diorio llegó a las semifinales de La Academia de ShowMatch junto a su amiga Celeste Muriega y hoy brilla en América Show, el espectáculo de Angel Carabajal que se presenta en el Espacio Mónaco de Villa Carlos Paz. "Estoy re contento de poder hacer temporada con América Show y admiro la cabeza que tiene Angel para crear semejante mega espectáculo: hay 300 metros de pantalla, músicos en vivo, artistas colgados por el aire que suben y bajan todo el tiempo, aparecen un avión y un tren en escena, el vestuario es de otro nivel y me enorgullece formar parte”, contó Diorio.

En una charla a solas con el periodista Nicolás Peralta, el bailarín se abrió como nunca y relató su durísima historia de vida. "A los 20 días de vida me operaron de una hernia y hasta los 11 años me pasé haciéndome estudios y sometiéndome a operaciones, hasta que dije: ´Listo, hasta acá llegamos y me quedo así´. Ahí fue cuando empecé a hacer deportes y nunca más paré”, sostuvo.

-Este año en la pista revelaste las operaciones que tuviste en tu infancia.

-Sí y fue muy loco porque después del programa me agarraron Marcelo, el Chato Prada y Fede Hoppe y me dijeron: “Che, Maxi, no sabíamos nada de todo lo que te había pasado”. Salió porque lo conté en una nota y Celeste llevó el tema a la pista. Conté algo pero tampoco tanto porque no me gusta mucho hablar de mí. Tuve de todo pero tampoco es que la pasé tan mal. Nada me impidió cumplir mis sueños y dedicarme a lo que tanto me gusta.

-Eso está bueno porque sos un ejemplo de que a pesar de cualquier adversidad, uno puede alcanzar sus objetivos y cumplir sus sueños.

-Eso sin dudas. Supuestamente yo no iba a poder caminar ni tener una vida normal ni ser deportista. Y, sin embargo, pude todo: fui ocho veces campeón argentino de gimnasia aeróbica de competición y representé a la Argentina por todo el mundo. Después me metí en la danza pero eso llegó una vez que pasé por todos los deportes: arranqué con gimnasia deportiva y luego me metí en handball, básquet, fútbol.

-¿De chiquito hiciste esos deportes?

-No, en la adolescencia. De chico no podía y no tenía una vida activa por todos los problemas que tenía. A los 20 días de vida me operaron de una hernia y hasta los 11 años me pasé haciéndome estudios y sometiéndome a operaciones, hasta que dije: “Listo, hasta acá llegamos y me quedo así”. Ahí fue cuando empecé a hacer deportes para descargar energía porque era realmente insoportable. Igual en mi casa mis papás me tenían medio como en una cajita de cristal.

 

-¿De qué te operaron de chico?

-De hernia cuando estaba recién nacido, a los 3 años de vuelta y después tuve muchas operaciones. ¡El pibe salió con todos los defectos! Nací con parálisis facial, problemas en las cervicales, malformación en la oreja, a los 20 días de vida me operaron… ¡Pobre mi familia! Las pasaron todas conmigo. Mis hermanos eran todos perfectitos y lindos y yo que fue el último llegué con todos los problemas.

-¿Durante el embarazo no se pudo ver nada en las ecografías?

-No, nada. Se enteraron de todo cuando nací. Aparte hace 40 años no había la tecnología que hay ahora. Existían las ecografías pero no había tanta información como sí se puede tener hoy.

-Los niños son burlones. ¿Sufriste bullying?

-Y, sí. Cada vez que salía un dibujito animado medio deforme, sabía que iba al colegio y ese dibujito iba a ser yo. Los pibes son re crueles pero entiendo que no tienen conciencia y dicen lo que piensan y lo que les viene a la cabeza. Ya es parte de ser nene. Al principio, me molestaba pero después lo fui llevando. Y al final hacía jodas y chistes yo con mi cara y mis problemas. Eso desactivaba la joda de los demás.

-¿De un ojo no ves?

-De los dos ojos veo mucho menos de lo que normal y de uno veo muchísimo menos que del otro. Del oído me operaron tres veces y lo reconstruyeron y ahí directamente no escucho nada del oído derecho. Viene de nacimiento: nací con parálisis facial y con el oído sin terminar de formarse del todo. Nunca fui igual de preguntar o averiguar qué fue lo que me pasó. Lo di como algo natural y listo. Mi familia siempre me apoyó incondicionalmente y ellos hicieron todo y más para que yo esté bien.

 

-¿Qué hacían, por ejemplo?

-De todo. Vivíamos en Mar del Plata y recuerdo que todos los meses íbamos a Buenos Aires para hacerme estudios u operaciones. Ir a Buenos Aires para mí era una fiesta porque me encontraba con mis primos y amigos que me llevaban a todos lados. Trataban de hacérmela pasar bien dentro de todo lo malo que me tocaba vivir. Entonces, si me preguntás tengo los mejores recuerdos. Obvio que no fue fácil porque pasé dos meses con la cabeza vendada por el oído pero era tanto el amor que me rodeaba, que no conservo malos recuerdos. Y eso es gracias a mi familia, que hizo de todo para que yo no sufra.

La entrevista completa con Maxi Diorio está en la edición digital de febrero de revista Pronto y se puede descargar y leer de manera gratuita haciendo click en este link