SINCERIDAD BRUTAL

Diego Ramos compartió su peor foto de entrecasa, ¡y se hizo cargo!: "Arruinando fantasías"

El actor, que pela su costado más sensual en la obra Sex, se sacó el mote de galán de encima y se mostró como nunca antes lo viste.

Escrito en ESPECTÁCULOS el

Coqueto por naturaleza, a Diego Ramos siempre se lo ve impecable. El actor, dueño de una prolífica trayectoria en televisión, teatro y cine, es un gran cultor de la vida sana y de la prolijidad. Se define como un tipo meticuloso y hasta obsesivo con la limpieza y la pulcritud. Y así se maneja tanto en su vida profesional como en la cotidianidad. Es más, en sus redes sociales comparte a menudo fotos de sus trabajos y en su casa, siempre muy cuidadas.


Sin embargo, en las últimas horas trascendió una foto un tanto particular, en la que se lo ve a Ramos como nunca antas se lo había visto y que derriba el mito del galán sexy y deseado. Lo llamativo también es cómo apareció la foto: no la filtró ningún periodista de espectáculos ni se la tomó por asalto un paparazzi o un curioso en la calle. Fue el mismísimo Diego quien la dio a conocer y hasta se permitió reírse de él mismo, en una suerte de sincericidio brutal.

¿De qué imagen hablamos? Una en la que se lo ve muy de entre casa, con barbijo, emponchado con una campera, sosteniendo una bolsa de nylon con mandarinas y comiendo gajitos de la fruta cítrica a la vez. "Me acaban de saludar porque fueron a ver Sex y dijeron que soy una bomba. Arruinando fantasías", escribió al pie de la foto en galán, y se permitió reírse de él mismo.

Vale recordar que todos los fines de semanas, Ramos la rompe en la obra Sex, de José María Muscari, que se presenta en el espacio Gorriti At Center y que agota las localidades en cada función puesto que el público quiere fantasear con los sensuales artistas que participan del espectáculo. Allí, Diego sale casi desnudo a escena y juega cuadros muy osados con sus compañeros, muchos de los cuales se muestran desnudos sobre el escenario.

Pero él, divertido, lejos de creerse el rol de personaje "bomba", tal como lo definió la fanática que le pidió una foto en la calle, se permite mostrarse desde otro lugar, con una imagen cotidiana y más cercana que nunca al común popular. ¡Lo bien que hace!